Por ello, el COGITI ha remitido un escrito a las Consejerías de las Comunidades Autónomas con competencia en materia de Certificación Energética de Edificios, denunciando la mala praxis por parte de dichas empresas, ya que sus órganos son responsables del control independiente de estos certificados, y deben ejercer cuantas inspecciones sean necesarias al respecto.
El Consejo General de la Ingeniería Técnica Industrial (COGITI), que integra 50 Colegios Profesionales y representa a más de 93.000 ingenieros colegiados, ha denunciado, ante las consejerías correspondientes de las comunidades autónomas, a cuatro empresas para cometer infracciones sancionables en materia de certificación energética de edificios, de obligado cumplimiento desde el pasado 1 de junio para vender o alquilar inmuebles, en cumplimiento del Real Decreto 235/2013 de 5 de abril.
En la denuncia presentada, se indica que las empresas aludidas ofrecen, a través de las páginas web o mediante publicidad insertada en los medios de comunicación escritos, la formulación de los certificados de eficiencia energética de edificios "a distancia" y " de oído ", sin que el técnico visite presencialmente el inmueble, por lo que infringen la exigencia impuesta por el artículo 5.5 del Procedimiento Básico aprobado por el Real Decreto 235/2013, que claramente exige que" durante el proceso de certificación, el técnico competente realizará las pruebas y comprobaciones necesarias, con el fin de establecer la conformidad de la información contenida en el certificado de eficiencia energética con el edificio o con la parte del mismo. "
Según consta en la denuncia, "lo que las correspondientes empresas o profesionales ofrecen es, pura y llanamente, que el cliente sea quien suministre a su gusto los datos o fotografías del edificio, o la parte del mismo que haya de ser objeto de la certificación. Todo ello, por tanto, sin la más mínima garantía de la veracidad de los datos e imágenes aportados ".
Por todo ello, el COGITI ha remitido un escrito a las Consejerías de las Comunidades Autónomas con competencia en materia de Certificación Energética de Edificios, denunciando mala praxis por parte de dichas empresas, ya que sus órganos son responsables del control independiente de estos certificados, y ejercerán cuantas inspecciones sean necesarias al respecto.
A esto hay que añadir que, como consecuencia de los perjuicios que esta mala práctica puede ocasionar a los compradores o arrendatarios de los inmuebles, y "el interés público general cifrado en el ahorro de energía", a consecuencia de la emisión de certificados de eficiencia energética falsos, la Administración competente podría incurrir en responsabilidad indemnizatoria ante estos terceros, con motivo del funcionamiento "anormal" del servicio público.
"Se está incumpliendo de forma flagrante la normativa en esta materia, y al mismo tiempo se está haciendo un flaco favor a la sociedad, con la comisión de estas y otras irregularidades. Además, cuando se frivoliza de esta manera tan descarada sobre un trabajo profesional, que debe contener un determinado rigor profesional y técnico, se está restando importancia al mismo, y esto conduce a la dirección contraria que persigue la normativa, y es que el ciudadano piensa que se trata de una tasa más que se ha inventado la Administración para continuar con su afán recaudatorio, y se obvia por completo la finalidad perseguida. la eficiencia energética es algo realmente beneficioso para la sociedad en muchos aspectos que van desde el económico, el confort, el medio ambiente, etc ..., y tenemos la obligación de transmitirlos correctamente para generar la cultura que posibilite conseguir los objetivos marcados ", manifestó el presidente del COGITI, José Antonio Galdón Ruiz.
El Consejo General de la Ingeniería Técnica Industrial (COGITI), que integra 50 Colegios Profesionales y representa a más de 93.000 ingenieros colegiados, ha denunciado, ante las consejerías correspondientes de las comunidades autónomas, a cuatro empresas para cometer infracciones sancionables en materia de certificación energética de edificios, de obligado cumplimiento desde el pasado 1 de junio para vender o alquilar inmuebles, en cumplimiento del Real Decreto 235/2013 de 5 de abril.
En la denuncia presentada, se indica que las empresas aludidas ofrecen, a través de las páginas web o mediante publicidad insertada en los medios de comunicación escritos, la formulación de los certificados de eficiencia energética de edificios "a distancia" y " de oído ", sin que el técnico visite presencialmente el inmueble, por lo que infringen la exigencia impuesta por el artículo 5.5 del Procedimiento Básico aprobado por el Real Decreto 235/2013, que claramente exige que" durante el proceso de certificación, el técnico competente realizará las pruebas y comprobaciones necesarias, con el fin de establecer la conformidad de la información contenida en el certificado de eficiencia energética con el edificio o con la parte del mismo. "
Según consta en la denuncia, "lo que las correspondientes empresas o profesionales ofrecen es, pura y llanamente, que el cliente sea quien suministre a su gusto los datos o fotografías del edificio, o la parte del mismo que haya de ser objeto de la certificación. Todo ello, por tanto, sin la más mínima garantía de la veracidad de los datos e imágenes aportados ".
Por todo ello, el COGITI ha remitido un escrito a las Consejerías de las Comunidades Autónomas con competencia en materia de Certificación Energética de Edificios, denunciando mala praxis por parte de dichas empresas, ya que sus órganos son responsables del control independiente de estos certificados, y ejercerán cuantas inspecciones sean necesarias al respecto.
A esto hay que añadir que, como consecuencia de los perjuicios que esta mala práctica puede ocasionar a los compradores o arrendatarios de los inmuebles, y "el interés público general cifrado en el ahorro de energía", a consecuencia de la emisión de certificados de eficiencia energética falsos, la Administración competente podría incurrir en responsabilidad indemnizatoria ante estos terceros, con motivo del funcionamiento "anormal" del servicio público.
"Se está incumpliendo de forma flagrante la normativa en esta materia, y al mismo tiempo se está haciendo un flaco favor a la sociedad, con la comisión de estas y otras irregularidades. Además, cuando se frivoliza de esta manera tan descarada sobre un trabajo profesional, que debe contener un determinado rigor profesional y técnico, se está restando importancia al mismo, y esto conduce a la dirección contraria que persigue la normativa, y es que el ciudadano piensa que se trata de una tasa más que se ha inventado la Administración para continuar con su afán recaudatorio, y se obvia por completo la finalidad perseguida. la eficiencia energética es algo realmente beneficioso para la sociedad en muchos aspectos que van desde el económico, el confort, el medio ambiente, etc ..., y tenemos la obligación de transmitirlos correctamente para generar la cultura que posibilite conseguir los objetivos marcados ", manifestó el presidente del COGITI, José Antonio Galdón Ruiz.